Protección contra el frío en el EPI: ropa de trabajo para el invierno
Trabajar a bajas temperaturas afecta a las funciones corporales tras poco tiempo. La motricidad, la concentración y la capacidad de reacción disminuyen rápidamente, lo que aumenta considerablemente el riesgo de cometer errores leves en el manejo de la maquinaria o incluso de sufrir lesiones graves por caídas o hipotermia. A esto se suma que el equipo de protección individual (EPI) a menudo debe cumplir varios requisitos al mismo tiempo. La ropa moderna de protección contra el frío combina estas funciones de protección en un sistema bien diseñado, lo que garantiza que los empleados puedan realizar sus tareas de forma segura, eficaz y protegida para su salud.
En este artículo descubrirá:
Peligros derivados de la exposición al frío
El frío afecta al cuerpo y al comportamiento. Las consecuencias van desde una pérdida temporal del rendimiento hasta graves daños para la salud.
Riesgos para la salud
- Hipotermia: cuando la temperatura corporal central desciende, las capacidades motoras y mentales disminuyen. La hipotermia grave es potencialmente mortal.
- Congelaciones locales: las extremidades (dedos de las manos y los pies, nariz, orejas) son especialmente vulnerables. En casos graves, pueden producirse daños irreversibles en los tejidos y los nervios.
- Sabañones e inflamaciones por frío: enrojecimiento, hinchazón y picor, a menudo dolorosos y prolongados.
- Carga para el sistema cardiovascular: Las reacciones al frío, como la vasoconstricción, aumentan la presión arterial, lo que es especialmente relevante en caso de enfermedades cardíacas previas.
- Enfermedades respiratorias: El aire frío y seco favorece la irritación y aumenta la probabilidad de infecciones respiratorias.
- Problemas articulares: la exposición frecuente al frío puede dañar las articulaciones a largo plazo y provocar limitaciones en el movimiento.
Riesgos para la seguridad y el rendimiento
- Reacciones de emergencia retardadas: la disminución de la concentración y la atención puede impedir reacciones rápidas.
- Riesgo de caídas y resbalones: el riesgo de accidentes aumenta considerablemente en superficies heladas o mojadas.
- Manejo inseguro de herramientas: la rigidez muscular causada por el frío y la reducción de la fuerza de agarre aumentan el riesgo de errores de manejo.
Cómo la humedad y el viento agravan los daños causados por el frío
La ropa mojada pierde su efecto aislante porque el agua desplaza el aire atrapado en las fibras. El problema es que el aire es un muy mal conductor del calor, mientras que el agua lo conduce mucho mejor. Esto significa que, si la ropa está húmeda, el calor corporal se transmite más rápidamente al exterior.
Además, el viento enfría el cuerpo más rápidamente, ya que expulsa continuamente la capa de aire caliente que lo rodea y la sustituye por aire más frío. Este efecto se denomina «efecto windchill» y se intensifica a medida que aumenta la velocidad del viento.
Resumen de las normas de protección contra el frío
Ropa de protección: Para proteger precisamente contra estos y otros peligros, las normas EN 342 y EN 14058 establecen requisitos de ensayo e índices que permiten evaluar de forma objetiva la eficacia protectora de las prendas contra el frío.
La norma EN 342 se aplica a temperaturas inferiores o iguales a -5 °C, mientras que la norma EN 14058 se aplica a temperaturas superiores a -5 °C. Ambas normas tienen en cuenta, además de la baja temperatura del aire, la humedad y la velocidad del viento.
Guantes de protección: en el ámbito de los guantes de protección contra el frío se aplica la norma EN 511, que evalúa la protección de los guantes contra el frío convectivo (aire) y el frío por contacto. En el pictograma de los guantes de protección contra el frío hay un código de tres dígitos cuyos números indican el nivel de rendimiento correspondiente:
- Primer dígito (frío convectivo): El nivel de rendimiento (0-4) indica la resistencia al frío que pasa.
- Segundo dígito (frío por contacto): El nivel de rendimiento (0-4) describe la resistencia térmica en contacto directo con un objeto frío.
- Tercer dígito (impermeabilidad): el nivel de rendimiento 0 significa penetración de agua después de 30 minutos, el nivel de rendimiento 1 significa que no hay penetración de agua.
Medidas de protección: organizativas, técnicas y personales (principio TOP)
Para garantizar la seguridad de las zonas de trabajo incluso en condiciones meteorológicas extremas, se pueden aplicar diversas medidas a nivel técnico, organizativo y personal.
Las medidas técnicas garantizan que los puestos de trabajo sigan siendo seguros. Las pantallas cortavientos, las cubiertas temporales o las carpas de trabajo resistentes a la intemperie reducen la influencia directa del viento y el frío sobre los empleados. Las fuentes de calefacción locales o los calefactores radiantes crean zonas de trabajo y descanso cálidas en las que los empleados pueden recuperarse rápidamente. Los revestimientos antideslizantes o una deshumidificación eficaz del suelo evitan las caídas en superficies heladas o mojadas y contribuyen así de manera decisiva a la seguridad en el trabajo.
Las medidas organizativas controlan durante cuánto tiempo y en qué condiciones los empleados están expuestos al frío. Mediante una evaluación minuciosa de los riesgos, se puede determinar con precisión la duración de la exposición, la intensidad del trabajo y las condiciones ambientales. Sobre esta base, se pueden ajustar los horarios y las rotaciones de trabajo, incorporar pausas planificadas para entrar en calor o diseñar planes de trabajo flexibles en caso de condiciones meteorológicas extremas. Los controles de salud periódicos garantizan la detección temprana de los signos de exposición al frío, de modo que se puedan tomar medidas correctivas a tiempo.
Las medidas personales garantizan la protección directa de cada empleado y surten efecto independientemente de las circunstancias externas o las medidas organizativas. Se pueden adaptar de forma flexible a diferentes actividades, tiempos de exposición y condiciones meteorológicas, de modo que se garantiza una protección individual óptima. Esta protección se consigue mediante equipos de protección individual adecuados, como guantes de trabajo aptos para el invierno, chaquetas y pantalones de alta visibilidad con certificación de protección contra el frío o incluso ropa de trabajo multinorma que cumple varios requisitos al mismo tiempo.
Concepto de estructura: sistema de capas
El sistema de tres capas es un principio probado en el que se llevan tres capas de ropa superpuestas para eliminar la humedad, retener el calor y proteger del viento, la lluvia o la nieve. Este sistema es especialmente flexible, ya que las capas individuales se pueden adaptar en función de las condiciones meteorológicas y el nivel de actividad.
La capa base se coloca directamente sobre la piel y tiene la función de eliminar el sudor de forma eficaz. Por lo tanto, lo ideal son los materiales transpirables como el poliéster, la poliamida y el polipropileno. Ciertas fibras naturales, como la lana merina, también tienen excelentes propiedades reguladoras de la humedad y aislantes, por lo que, en principio, serían adecuadas para la capa base. Sin embargo, dado que a la hora de elegir el material también deben tenerse en cuenta aspectos como el precio, el mantenimiento y, por último, pero no por ello menos importante, el bienestar animal, las fibras naturales solo se utilizan de forma limitada para la protección contra el frío. Incluso el algodón es solo parcialmente adecuado para la protección contra el frío, ya que elimina relativamente poca humedad del cuerpo.
La capa aislante sirve para almacenar el calor corporal y evita la pérdida de calor al entorno. Los materiales más utilizados son el vellón, el plumón y la lana. El vellón, un tejido rugoso fabricado principalmente con poliéster, destaca por su ligereza, alta transpirabilidad, rápido secado y fácil cuidado. Además, su estructura rugosa atrapa el aire, cuya mala conductividad térmica natural forma una barrera térmica especialmente eficaz.
La capa protectora contra las inclemencias meteorológicas protege del viento, la lluvia y la nieve, y evita que la humedad del exterior penetre en el sistema de ropa. Las soluciones típicas son las capas duras (tejidos impermeables, altamente resistentes a la abrasión, con membrana o revestimiento) y las capas blandas (resistentes al viento y al agua, mucho más transpirables). Las propiedades decisivas son la impermeabilidad (membranas/laminados o revestimientos de PU, costuras selladas), la transpirabilidad (para eliminar la humedad corporal durante la actividad), la resistencia a la abrasión y de las costuras, así como detalles funcionales como capucha, aberturas de ventilación y cierres ajustables. La elección depende del perfil de uso: en caso de esfuerzo físico intenso, suele ser recomendable una solución muy transpirable y ligeramente repelente al agua, mientras que en caso de precipitaciones prolongadas suelen ser preferibles los sistemas totalmente impermeables y sellados.
Nota: Los EPI deben cumplir a menudo varios requisitos al mismo tiempo, como una mayor visibilidad, propiedades antiestáticas o protección contra productos químicos. La ropa moderna de protección contra el frío combina estas funciones en un sistema coordinado, por lo que los compromisos en cuanto a los materiales son en parte inevitables.
Conclusión
La protección contra el frío es una parte importante de la seguridad en el trabajo: previene daños para la salud, reduce el riesgo de accidentes y garantiza la productividad en el lugar de trabajo. Mediante una evaluación de riesgos bien fundamentada, medidas organizativas y técnicas adecuadas y el uso de EPI multifuncionales para la protección contra el frío, los empleadores protegen a sus empleados de manera eficiente. Las inversiones en ropa adecuada, cuidado y organización dan sus frutos a largo plazo gracias a la reducción de las bajas y al aumento de la seguridad.
Preguntas frecuentes
¿Cuándo se aplica la norma EN 342 y cuándo la norma EN 14058?
La norma EN 342 se aplica a los sistemas de vestimenta para condiciones de frío extremo (normalmente ≤ −5 °C), mientras que la norma EN 14058 evalúa las prendas para condiciones de frío moderado (por encima de −5 °C). La elección de la norma depende del ámbito de aplicación previsto y de las condiciones ambientales.
¿Qué significa la marca EN 511 en los guantes?
La norma EN 511 evalúa los guantes contra el frío convectivo (número 1), el frío por contacto (número 2) y la impermeabilidad (número 3). La combinación de los tres números proporciona información sobre el nivel de rendimiento y los límites de uso de un guante de protección contra el frío.
¿Cómo funciona el sistema de tres capas (layering)?
El sistema consta de una capa base que absorbe la humedad, una capa aislante que proporciona calor y una capa protectora contra el viento y el agua. La combinación de estas capas permite adaptar de forma óptima el aislamiento, la transpirabilidad y la protección contra las influencias ambientales.
¿Cómo se cuida y se mantiene correctamente el EPI de protección contra el frío?
Siga las instrucciones del fabricante para el lavado, la impermeabilización y el almacenamiento. Los materiales aislantes y las membranas pueden ser delicados, por lo que un cuidado adecuado y un control regular contribuyen a prolongar su efecto protector y su vida útil.
¿Qué productos ASATEX protegen de forma fiable contra el frío?
En ASATEX encontrará guantes de trabajo aptos para el invierno, chaquetas y pantalones de alta visibilidad con certificación de protección contra el frío, así como ropa de trabajo multinorma. Si lo desea, le asesoraremos de forma personalizada en la selección, la talla adecuada y la integración en su concepto de protección.